Las frecuentes frustraciones y la búsqueda inalcanzable pueden desgastar el espíritu de una persona. Después de haber experimentado demasiadas cosas malas, desde un punto de vista físico, nuestros meridianos se ven afectados. Luego, nuestros nervios también sufren cierta presión. Desde un punto de vista psicológico, nuestras emociones y nuestro espíritu se ven impactados, y para ser más directos, nuestra energía vital se pierde. Hay dos maneras de recuperarse: la búsqueda interna y la búsqueda externa. Como personas comunes, en realidad buscamos tanto lo interno como lo externo, porque no somos dioses, no podemos lograr una búsqueda interna completa, esa completa iluminación que permite un crecimiento personal instantáneo. Así que otro camino es la búsqueda externa. ¿Y cómo buscamos externamente? Salir a jugar, disfrutar de hermosos paisajes, conectarse con compañeros que son más activos y más jóvenes que tú, relacionarse con esos jóvenes que tienen más energía que tú; todo esto se convertirá en tu medicina para sanar.