La inflación subyacente en Japón alcanza su nivel más alto en más de dos años, el Banco Central de Japón está bajo presión.

El 23 de mayo, los datos publicados el viernes mostraron que la inflación subyacente al consumidor de Japón alcanzó el 3,5% en abril, la tasa de crecimiento anual más rápida en más de dos años, y el banco central siguió bajo presión para subir aún más las tasas de interés. Los datos pusieron de manifiesto el dilema del Banco de Japón a la hora de equilibrar las presiones sobre los precios de la persistente inflación de los alimentos y los vientos en contra del crecimiento derivados de los aranceles del presidente estadounidense, Donald Trump. El IPC subyacente (que incluye los productos derivados del petróleo, pero excluye los precios de los alimentos frescos) registró el crecimiento anual más rápido desde enero de 2023 (4,2%) y lleva más de tres años por encima del objetivo del 2% del banco central. Otro índice, que excluye el combustible y los alimentos frescos, subió un 3,0% interanual en abril, mostraron los datos, y el índice es seguido de cerca por el Banco de Japón para medir mejor las presiones de precios impulsadas por la demanda.